Egoístamente enamorado de ti
Ace era egoísta. Él quería. Quería no sólo polvos rápidos en trasteros cuando no podían esperar o palabras apresuradas que sólo se decían de noche, sino mañanas lentas uno al lado del otro mientras el sol salía sobre el barco y besos suaves sin importar si los demás los veían y mil cosas pequeñas y grandes más que no...