En un convento-escuela donde las reglas ahogan más que la fe, Angélica confunde a un ángel con un demonio y a un demonio con su salvador. Entre lo sagrado y lo prohibido, descubrirá que amar puede ser la mayor herejía.

En un reino donde las apariencias lo son todo y el poder se esconde tras sonrisas de cortesía, Margaret Westcott y Sir William Blackwood desafían el destino. Ella, una mujer de nobleza modesta, cargada con el peso de un pasado turbulento y una familia que la ve como la oveja negra. Él, un caballero honorable, nervioso ante la perspectiva de su primer matrimonio, enfrentando la sombra de un padre cuya influencia aún palpita en los pasillos del palacio. Desde el momento en que sus caminos se cruzaron siendo jóvenes, una chispa de promesas no dichas los unió. Ahora, mientras el eco de sus votos resuena en la capilla, el amor debe abrirse paso entre las intrigas de la corte y los fantasmas del pasado. El exmarido de Margaret, un ladrón confinado tras los barrotes, no puede creer la nueva vida que ella ha construido, mientras el nerviosismo de William se convierte en una determinación feroz por proteger lo que más ama. En medio de los eventos de la alta sociedad, los secretos familiares y la inquebrantable lealtad, Margaret y William deben descubrir si su amor puede soportar las pruebas del destino y las maquinaciones de aquellos que los rodean. Porque en un mundo donde cada mirada es una promesa o una traición, ellos deben aprender a confiar, no solo en el otro, sino en sí mismos.