Casi tres días
Los meses habían pasado y nadie tenia noticia de Ash. Se había esfumado completamente, y todos lo daban por muerto. Todos menos Eiji. Él, con su vida recuperada en su tierra natal, todavía tenía la esperanza de volvérselo a encontrar sano y salvo, y quizá fueron esos pensamientos y fe casi inquebrantable los que lo ma...