Cartas.
A quien -por casualidad o concienzudamente- esté leyendo esto: tengo un papel en blanco delante y una pluma en mano. Escribiré a mis temores y a mis sueños, a personas reales e inventadas. Te dejo que eches un vistazo a mis pensamientos, querido lector. Se despide, siempre a tu disposición: b.