leitojin
Sinopsis:
Seokjin siempre sintió que no encajaba, que los moldes diseñados para todos no estaban hechos para él. Por más que lo intentara, por más que tratara de adaptarse una y otra vez, nunca lograba ser como los demás. Fue en uno de esos momentos de vacío cuando encontró "la Mugunghwa", como él lo llamaba, esa flor que le mostró algo diferente: que tenía más colores de los que imaginaba, que podía habitar en muchos lugares y ser conocida de muchos nombres.
Por un instante, Seokjin pensó que finalmente había encontrado su lugar. Pero pronto comprendió la verdad: una flor que simboliza tantas cosas jamás podría representar lo que él era. Las flores no se esconden; las flores se cultivan y se muestran, se cuidan, incluso frente a las plagas que intentan destruirlas. Pero él no era una flor. Seokjin era la plaga.
La Mugunghwa lo deslumbró con su resistencia, con su belleza, con su capacidad de renacer a pesar de todo. Era todo lo que Seokjin no era. Y aunque se sintió atraído por ella, comprendió que nunca sería suyo y jamás tendrá sus colores. No porque no quisiera, sino porque simplemente no podía. La Mugunghwa simbolizaba lo que nunca logró alcanzar y jamás podrá representar.