Chifuyu Matsuno siempre pensó que amar era sinónimo de soportar. Que si se esforzaba lo suficiente, si se aferraba con fuerza, nadie lo dejaría. Pero cuando Yuta -la persona que más amaba- decide abandonarlo, todo lo que Chifuyu conocía sobre el amor se desmorona. Keisuke Baji, en cambio, aprendió a sobrevivir a la soledad. Perdió demasiado, y el silencio se volvió su refugio. No busca amor, ni promesas, ni segundas oportunidades... hasta que Chifuyu aparece, desordenando su mundo con una sonrisa rota. Lo que comenzó como un acuerdo sin compromiso se convierte poco a poco en una historia sobre sanar, confiar y aprender que el amor no debería doler. A veces, dos personas rotas pueden enseñarse mutuamente a recomenzar.