Las historias no terminan, solo se dejan de contar.

El enemigo los arrancó de la cama y los obligó a huir. Pero no se detendrá hasta destruir todos sus refugios. Los aeternianos reunirán lo poco que les queda y desafiarán una vez más a su mayor pesadilla: perder a sus seres queridos. Alelí y Cruz una vez más deberán pelear batallas individuales antes de volver a encontrarse. Y ésta vez no serán los únicos en contar la historia.

No se puede cambiar el pasado. Las aventuras continúan. Alelí está en manos del rey Hefesto. Cruz y los demás fueron a buscarla. Un viaje donde todos sabrán quienes son realmente y de lo que son capaces de hacer. Pero al volver los espera la guerra y una nueva amenaza. ¿Habrá otra falsa paz? ¿Qué son las luces fantasmas? ¿Qué tan valiente podés ser por tus seres queridos? Porque los soldados lloran, pueden volver a casa.

Un día descubren dónde están. Alelí ni siquiera sabía que la estaban escondiendo, que el hombre que la crió conocía a sus padres o que su mejor amiga y el chico que le gusta tanto son soldados brujos. Mucho menos pudo saber que desde ese día todo iba a cambiar para siempre. Alelí y Cruz cuentan la historia sobre cómo se conocieron en la guerra mágica. Cómo se enamoraron. Cómo aprendieron a confiar en sus seres queridos. Cómo gritaron las traiciones. Como lloraron las pérdidas sin soltar la espada. Cómo se agarraron de las manos mientras el mundo se les caía alrededor. ¿Qué es ser valiente cuando es la única opción?