Glass Days | Obligado a vivir sobre el hielo, Sunghoon solo conoce el peso de las expectativas y la soledad de un corazón cansado. Una caída lo lleva a un hospital, donde conoce a Sunoo, un chico de sonrisa frágil y mirada paciente. Entre pasillos y visitas inesperadas, nace una conexión que ni el tiempo ni la enfermedad podrán detener... aunque sí cambiar para siempre. ᯓ SunSun. ᯓ Angst. ᯓ Historia finalizada. ᯓ 160825

Encerrado por él. ¿Su captor? Park Sunghoon. Rico, peligroso, cruel... y guapo de forma molesta. Dice que necesita respuestas. Dice que no confía en nadie. Y por alguna razón, cree que Sunoo es importante. Ahora está encerrado en una mansión, esposado, vigilado, y con la sensación de que no todo es lo que parece. ¿Sunghoon está loco? Tal vez. ¿Lo odia? Puede. ¿Lo desea? ...eso empieza a dar más miedo. -¿Entonces qué? ¿Un puto capricho? ¿Una mascota más para tu jaula privada? Sunghoon rió suavemente. Luego, en un movimiento seco, lo agarró de la camiseta y lo giró bruscamente, estampándole la cara contra la pared. Su mejilla chocó contra el muro, y Sunghoon lo empujó desde atrás, inmovilizándolo con el cuerpo. Sus labios quedaron peligrosamente cerca de su nuca, su aliento caliente quemándole la piel. -Mira, zorra asquerosa...- susurró con la voz ronca, tan cerca que le rozó la piel al hablar -Vuelve a hablarme así y vas a sufrir más de lo que ya te espera.

𝗦𝗨𝗡𝗦𝗨𝗡𝗞𝗜 || ¿Alguna vez habéis hablado de fantasías? ☘︎ 𝗦𝗵𝗼𝗿𝘁𝗳𝗶𝗰. ☘︎ 𝗚é𝗻𝗲𝗿𝗼: Fanfic / Romance. ☘︎ 𝗜𝗻𝘀𝗽𝗶𝗿𝗮𝗱𝗮 𝗲𝗻: La filia "cuckolding". ☘︎ 𝗟𝗲𝗲𝗿 𝗯𝗮𝗷𝗼 𝗮𝘂𝘁𝗼𝗿𝗶𝘇𝗮𝗰𝗶ó𝗻 𝗽𝗿𝗼𝗽𝗶𝗮. × 𝗡𝗢 se permiten copias ni adaptaciones sin mi consentimiento. 𝐎𝐑𝐈𝐆𝐈𝐍𝐀𝐋 || ©_𝗺𝗼𝗺𝗼𝗻𝘆_

𝗦𝗨𝗡𝗦𝗨𝗡 || ¿Quién diría q una historia de amor podría comenzar simplemente por un celular? ☘︎ 𝗢𝗻𝗲 𝘀𝗵𝗼𝘁. ☘︎ 𝗚é𝗻𝗲𝗿𝗼: Fanfic / Romance. ☘︎ 𝗟𝗲𝗲𝗿 𝗯𝗮𝗷𝗼 𝗮𝘂𝘁𝗼𝗿𝗶𝘇𝗮𝗰𝗶ó𝗻 𝗽𝗿𝗼𝗽𝗶𝗮. × 𝗡𝗢 se permiten copias ni adaptaciones sin el consentimiento del autor original. 𝐎𝐑𝐈𝐆𝐈𝐍𝐀𝐋 || @𝗯𝟯𝗼𝗺𝘆𝗺_𝗴𝘆𝘂

Sunghoon y Sunoo son exnovios y ahora Sunghoon tiene novia. Después de estar años sin verse, son asignados compañeros de cuarto en la universidad, y Sunoo está dispuesto a demostrarle que siempre fue su primer deseo y que sigue pensando en él. "¿Tienes envidia, Sunghoon? ¿Te molesta que alguien más me quiera tocar ahora que tú ya no puedes?" "¡No es envidia!" replicó Sunghoon, su voz subiendo un tono antes de que pudiera controlarse. Sunoo rió suavemente, inclinándose hacia él, tan cerca que sus rostros estaban a solo centímetros de distancia. "Claro que lo es. Se te nota en la cara, cariño. Pero tranquilo, no voy a decírselo a tu novia. Sería una pena que te dejara por un comentario descuidado." "Deja a Haneul fuera de esto," espetó Sunghoon, pero su voz era menos firme, más insegura. Sunoo ladeó la cabeza, observándole con una mezcla de diversión y algo más serio. "¿Sabes qué? Tal vez debería hacerle un favor y decirle lo mucho que miras mi culo cada vez que me doy la vuelta. Apostaría que estaría interesada en saberlo." Sunghoon dio un paso más cerca, su mirada dura como el acero. "No te atrevas." Sunoo se encogió de hombros, levantando una mano en un gesto de falsa rendición. "Tranquilo, no soy tan cruel... todavía. Pero te lo advierto, Sunghoon. Si sigues comportándote como un niño que perdió su juguete favorito, voy a empezar a jugar de verdad. Y créeme, no te gustará cómo termina ese juego."

Luces, cámara... y mucho drama. Sunoo pensaba que lo tenía todo bajo control... hasta que apareció Sunghoon. ¿Quién dijo que una sesión de fotos podía cambiar tu corazón? Los sentimientos aparecen donde menos lo esperas... y cuando no los deseas. Y con la pequeña Yeji cerca, todo se vuelve aún más impredecible con su compañía inseparable y compromiso a juntarlos...

Kim Sunoo es un escritor que lleva trece años aferrado a una única historia que no puede concluir. No lo hace por testarudez, sino por el magnetismo de su protagonista: Park Sunghoon, el chico perfecto que solo existe en las páginas de su cuaderno. Después de una larga cadena de rechazos editoriales, algo se enciende en él cuando recibe la ilustración definitiva de su personaje, idéntica a la imagen que ha guardado desde la adolescencia. Conmovido por la mezcla de derrota y esperanza, deja escapar un deseo íntimo y casi vergonzoso. "Ojalá fueras real. Cómo me gustaría que existieras de verdad". Cree que es un pensamiento fugaz, una tontería nacida del cansancio. Sin embargo, al amanecer descubre que la frontera entre ficción y realidad ha cedido, pues Sunghoon aparece en su habitación convertido en un muchacho de carne y hueso dispuesto a ayudarlo a terminar la novela que lleva años atorada. A partir de ese instante, Sunoo deberá convivir con el chico de sus sueños, enfrentar a un protagonista que opina, exige y siente, y descifrar si aquello que nació como un impulso creativo puede sostenerse en el mundo real.

Sunghoon nunca pensó que su vida volvería a sentirse tranquila. Desde que el omega que amaba los abandonó, su mundo se redujo a una sola prioridad: su hija, Minji. Entre las mañanas en el Haetsal Café y las noches ayudándola a dormir, aprendió a vivir sin esperar nada más. Hasta que apareció Kim Sunoo. El nuevo maestro del kinder, con una voz suave, aroma a melocotones y una sonrisa capaz de desarmar cualquier barrera. Minji lo adoró desde el primer día... y Sunghoon, sin entender cómo, comenzó a hacerlo también. 𖦹 ׂ 𓈒 🥞 ／ ⋆ ۪ • Romance, soft, comedy, omegaverse, smut, m-preg. • Sunghoon alfa! Sunoo Omega! • Ships secundarios: Heejake, Jaywon. • Se presentarán personajes/ships fuera de Enhypen. ⤷ Historia completamente de mi autoría. ᶻ 𝗓 𐰁 .ᐟ Si la historia no es de tu agrado, evita los comentarios negativos y simplemente deja de leer.

En una ciudad donde la oscuridad siempre guarda más secretos de los que la luz se atreve a mostrar, dos mundos destinados a no encontrarse se cruzan por accidente... o quizá por destino.

En un mundo donde la luz de los escenarios nunca alcanza a iluminar del todo las sombras que dejan los sentimientos rotos, caminan una línea delgada entre el sueño y la destrucción. Entre entrenamientos nocturnos, silencios incómodos y miradas que dicen demasiado, los dos terminan desnudando sus heridas sin tocarse, descubriendo que el otro es el único lugar donde el dolor por fin deja de arder.