Jonas Blacktide y Sirena Smid fueron enemigos desde el día en que ella, una reconocida coleccionista de tesoros antiguos, descubrió que un hombre la seguía. Un año después, sus destinos volvieron a cruzarse en una isla perdida, donde pelearon por unas gemas legendarias capaces de abrir un portal hacia lo desconocido. Años más tarde, el eco de aquella rivalidad aún resuena en la sangre de sus descendientes. King Adams y Emma Smid han crecido entre secretos, leyendas y un pasado que se niega a morir. ¿Seguirán el camino marcado por la guerra de sus padres... o romperán el ciclo para forjar su propio destino? El mar oculta muchas verdades, y no todas deberían ser descubiertas.

Como ángel, mi deber es proteger a los inocentes y luchar contra el mal. Pero cuando me asignan la misión de proteger a Kyng Adams, un mafioso peligroso y sádico, mi mundo da un giro inesperado. A medida que me acerco a él, descubro que hay más en Kyng de lo que parece. Detrás de su fachada de crueldad y poder, hay un hombre vulnerable. Y yo, contra todo pronóstico, me encuentro atraída por él. Pero mi amor por Kyng es un pecado. Si mis superiores descubren que he caído en la tentación, me desterrarán del cielo para siempre. Y para colmo, la guerra entre el cielo y el infierno se acerca, y Kyng es la clave para prevenirla. ¿Podré protegerlo y prevenir la guerra, sin perder mi alma en el proceso? ¿O mi amor por él será mi condena."Mientras tanto, mi hermana, que también es ángel, ha conocido a alguien que la ha hecho cuestionar su fe y su lealtad. Amenadiel, un ángel caído con un pasado oscuro y un corazón rebelde, ha capturado su atención y su corazón. Pero la relación entre mi hermana y Amenadiel es peligrosa y está llena de confusión. Como ángel caído, Amenadiel es un enemigo del cielo y de todo lo que representamos. Y sin embargo, mi hermana no puede negar los sentimientos que siente por él. Mientras yo lucho con mis propios sentimientos por Kyng, mi hermana se encuentra atrapada en una red de emociones y lealtades en conflicto. ¿Podremos ambas encontrar la manera de seguir nuestros corazones sin perder nuestras almas en el proceso? ¿O la guerra entre el cielo y el infierno nos separará para siempre?