5/5 Xeno Houston Wingfield no cree en los sueños. Cree en las variables, en los datos precisos, en el control quirúrgico de la mente sobre la emoción. Pero cuando el insomnio amenaza con consumirlo, termina recurriendo a Somnia: una nueva línea farmacéutica de píldoras para dormir... y soñar. Sueños vívidos, diseñados para ofrecer descanso sin efectos secundarios. Él. Un rubio con sonrisa insolente y ojos que parecen saber más de lo que deberían. Un hombre que aparece en sus sueños una y otra vez, que lo llama "cerebrito" y lo mira como si lo conociera desde siempre. Pero los sueños, sueños son... ¿no? Cuando en una presentación militar Xeno se cruza con un soldado de carne y hueso idéntico al intruso de sus sueños, todo el rigor científico comienza a resquebrajarse. Stanley Snyder existe. Está allí, frente a él, respirando, hablándole... y también preguntándose por qué ha estado soñando con un científico que no debería conocer. ¿Qué ocurre cuando dos mentes sincronizadas se encuentran antes de haberse conocido? ¿Y si dejar de soñar no es una solución... sino un nuevo comienzo? Historia finalizada porque está autora ya tenía esta historia lista, siéntese, hágase algo de tomar y disfrute sin sufrir por esperas.

Una noticia hace que Xeno recuerde todo lo que vivió... Y que la VIDA aun tiene muchas sorpresas y esperanzas