¡NO SOY GAY!
¡NO SOY GAY! Eso es lo que gritaba Xiao Zhan cada que alguien le preguntaba. Era ofensivo que lo llamarán de esa forma, jamás sería uno de ellos. Pero una nueva aplicación que su amigo había descargado en su teléfono haría que se diera cuenta que había hecho match con su "enemigo".