Así es como los héroes se convierten en villanos: Por amor, traición o por fantasías. Atila Faith, heredero del Imperio Faith, ha fantaseado con tenerlo todo y vengarse de todos los que provocaron su caída. Ese día está por llegar, de la mano de su otro imperio. Conocido como el fantasma de la mafia sangrienta, volverá por el cargo de emperador que le fue arrebatado hace tanto tiempo. Y va a cumplir cada una de sus fantasías, haciendo que todos, hasta el amor que llegó a su vida, le supliquen de rodillas. El fantasma de los Bloody Faith, cumplirá lo que tanto quería: No será un héroe como su padre el emperador pero si será el villano que todos pedían. Atila Faith, el tirano fantasma de sus fantasías. El niño que no tuvo otra elección y esa fue la única manera de mantenerse con vida.

El olor a sangre se quedó impregnado en sus fosas nasales gracias a la guerra que no comenzó. También le arrebató a sus padres, su inocencia, su niñez, su alma y la capacidad de ver un nuevo día. A cambio, como cicatrices de aquellos atroces días, le regalaron dos galaxias en lugar de ojos y un dolor constante al caminar, al vivir. Incluso ahora, queriendo huir de ser un villano y de los terribles actos cometidos por sus manos, no tiene elección. Ario, el 2do de los príncipes del imperio Faithsyano, perdió más que sus hermanos. Su único deseo, entonces, es ser el mejor estratega del imperio y de la mafia sangrienta. Aunque el olor a muerte lo persiga.

Condimentos, ingredientes complicados y un poco de amor de hermanos. Eso es lo que siempre dice Kadet Faith, el 3ero al mando de la mafia sangrienta y 3er príncipe del nuevo imperio Faithsyano, acerca de sus platillos estrella. Pero Kadet delira con replicar el sabor de la comida que compartía con sus hermanos después de la caída de la villa. Lo que tanto extraña es el sabor de la muerte entrando en su boca y el instinto de supervivencia que nunca abandonó su cabeza. En un frenesí delirante, intentará replicar de cualquier forma ese maldito sabor sin percatarse que alguien lo está mirando. Delira con demostrar que él es un villano de gustos refinados. Pero, ¿Cuánta carta abierta tendrá al otro lado de su mundo? Occidente tiene más placeres parecidos a sus retorcidos delirios. ¿Qué carta le están jugando al enviarle a la mejor cazadora entrenada por sus 2 hermanos?

Una chispa, una bomba, un recuerdo como un sueño. Benxamías Faith regresa de la última batalla contra el imperio enemigo por orden de sus hermanos, está herido. ¿Ganó? ¿Ganaron? La situación es confusa y el caos que crece en su mente le hace tener sueños con sabor a muerte. Todo empeora cuando los reportes indican que Benxamías es una persona completamente distinta en el campo, volviéndose un completo demente, un villano. Por ello, su antiguo apodo: la sombra, ha quedado en el olvido. Ahora sabe que le llaman el capitán muerte y tiene las manos tan manchadas como sus hermanos. Algo no cuadra, algo le extraña. ¿Por qué tiene esos sueños con hedor a muerte al lado de sus hermanos? La gloria de un imperio, la caída del niño al que protegieron tanto. Benxamías lo sabe cuando el amor no le es suficiente, aunque lo haya encontrado.