El Overlord de las apuestas, Husk, se ha vuelto el demonio más ambicioso del infierno, uno de los más reconocidos por no temerle a nada más que a la correa que le han intentado imponer. Así era hasta la aparición del demonio de la radio, Alastor, un nuevo lord de las entrañas del abismo, el cual termina ganando y por medio de un contrato terminará tomando posesión del alma de Husk. El trabajo es simple: Traerle demonios. Fácil, ¿cierto? No podrá desobedecer, pues le costaría más de lo que ha hecho perderle a otros en apuestas. Ahora más que nunca, no puede dejarse llevar por ni un hombre. Pero al conocer a la próxima victima de Alastor, podría llevarlo a luchar contra las cadenas que le arrebatan libertad, y su corazón no podría estar en el contrato que lo maldice. Hasta el gato más domesticado no puede evitar amar el pecado.

Yashiro Nene siempre ha tenido debilidad por los chicos guapos. No es ningún secreto. Sin embargo, jamás imaginó que llegaría a ver con otros ojos a Teru, el fan número uno de su mejor amiga. Cuando Akane aparece con una presencia completamente diferente, con un aire de príncipe sacado de un cuento de hadas, el corazón de Yashiro da un vuelco. Por un instante, su pensamiento más egoísta se hace presente: Quiero ser ella. Hanako no tarda en notar su repentina fascinación, y los celos comienzan a surgir. Por otro lado, Akane, confundido pero ligeramente halagado, empieza a cuestionarse si su aspecto realmente es tan terrible como siempre pensó. Entre halagos impulsivos, miradas asesinas y una negación a último momento, Yashiro se enfrenta a un dilema inesperado: ¿qué pasa cuando sientes atracción por alguien que tu mejor amiga rechazó?

El amor... El amor lo es todo para algunas personas... Tanto que harían lo que sea por tener a como de lugar. ¿Todos merecen un final feliz? ¿Tus pecados ya fueron perdonados para olvidar todo y empezar de nuevo? ¿O por lo menos puedes vivir sin la persona frente a ti? Odio el amor, me da un mal sabor de boca... No quiero terminar como esta historia sin final... por ahora...