Samira recibiría una simple vela "mágica" por su quinceavo cumpleaños, la cual le cambiaría la vida por completo.
Sin embargo, no imaginaria que conocería al gran amor de su adolescencia, Pato Sardelli.
Guido Sardelli nunca había conocido a alguien como Sofía: intensa, apasionada y con un brillo que parecía resistir incluso en los momentos más oscuros. Pero a veces las historias a las que uno se aferra dejan heridas que el tiempo va a tardar en curar.