Helena Basile es una periodista subestimada, atrapada en una revista de poca credibilidad y marcada por una autoestima frágil. Vive rodeada de plantas, libros y una calidez que parece no pertenecer al mundo en el que intenta abrirse paso. Su vida da un giro cuando de manera imprevista y accidentada se acerca al senador Augusto R. Cottingham: un hombre frío, admirado y temido, que ha aprendido a no confiar en nadie. Lo que inicia como un encuentro fortuito se convierte en una relación secreta e intensa, donde Helena duda de merecer ser vista, mientras Augusto, incapaz de soltarla, comienza a confundir el amor con una obsesión silenciosa. En un contexto de traiciones, ambición y riesgo, ambos deberán enfrentarse a sí mismos y a una verdad incómoda: cuando el deseo se desborda, la limerencia puede ser tan peligrosa como el poder.

No se adelanten a juzgarme. Tanto ella como yo tuvimos culpa de todo lo que sucedió, yo también fui victima de mí mismo, y perdí el control cuando ella me miró por primera vez.