Worum__
Chae-won estaba al borde de la desesperación. Desde pequeña, la vida le había dado más golpes que alegrías, pero siempre había mantenido la esperanza de que algún día todo cambiaría. Sin embargo, hoy esa esperanza se sentía lejana, casi ridícula. La vida había sido una sucesión de días grises y cuentas impagas. Cada vez que cerraba los ojos, escuchaba los gritos de los prestamistas, las amenazas que ya no eran solo palabras vacías.
Una carta observó, y con ella, un número. A Chae-won no le quedo de otra que llamar, pues, anteriormente un hombre de traje elegante y un maletin repleto de billetes le dio una propuesta que parecía demasiado buena para ser cierta. Le ofrecían una salida, una solución a sus problemas. Solo tenía que hacer una cosa: presionar el botón de llamar.
Tomó el teléfono con manos temblorosas. Miró la pantalla durante varios segundos, sintiendo cómo el tiempo se dilataba. En ese momento, la decisión era clara. No quería seguir viviendo así, con esa presión aplastante, esa sensación de estar a punto de caer. De alguna forma, pensó que, al presionar ese botón, podría liberarse, o al menos sentir que tomaba el control de su vida, aunque fuera solo por un momento.
"Nombre y apellido completo", dijo la voz al otro lado, fría, distante. Ella sabía que había cruzado una línea, que a partir de ese momento, nada volvería a ser igual.
Y en ese momento, entendió que el verdadero terror estaba por llegar.