Cuantas veces hay que equivocarnos para que tomemos el rumbo correcto? que tanto tenemos que perder para darnos cuenta de lo que realmente nos hará feliz? Un amor prohibido cambiara todo... Wigetta, Lutaxx, Witaxx, Lugetta y solo tal ves un poco de... Luzana

donde frank esta celoso de eva, la novia de su amigo con derechos. ✧alex tops, frank bottom. ✧fanfic inspirada en pacify her & play date ✧ninguna de las palabras como ''perra'' o ''puta'' van dirigidas con mala intención, esto es solo ficción y con ánimos de entretener. ✧minúsculas a propósito. yari© prohibida su adaptación o copia.

-Dame una oportunidad para que te enamores de mi. -Estas loco de remate. -Una semana para enamorarte, 7 citas, y si aun no quieres salir conmigo, dejaré de molestarte, ¿aceptas? Le miró dudoso, pero luego sonrió. -Acepto.

- Te apuesto que no consigues enamorar y salir con el chico más feo de la universidad . - Acepto. [...] - ¿Estás seguro de esto, Samuel? - Tranquilo, Rubius, sé lo que hago.

Una relación fallida, errores cometidos, engaños, mentiras, desconfianza... las cosas para esta pareja se arruinaron y ni siquiera ellos saben como paso, se concentraron en todo lo malo que les sucedía sin fijarse en ese amor que se tenían, ese amor que los junto por primera vez. Uno quiere olvidarse por completo de lo sucedido mientras el otro le escribe cartas llenas de esos pensamientos que no le permiten continuar con su vida. ¿Existe solución a todo esto? //Historia únicamente wigetta //

Hacía unos meses, Willy había cometido el mayor error de su vida, y como consecuencia de eso su corazón estaba sufriendo por ello. No pasaba un minuto en el que no se sintiera la persona más despreciable del mundo. Había imaginado miles de veces cómo solucionar las cosas, o al menos apaciguarlas. Hasta que tuvo la idea de escribir esa carta.

[Two-Shot] Guillermo sufría por su relación y lloraba en la noche, creyendo que Samuel no lo escuchaba; Samuel, al ver a su novio llorar, sufría por no saber por qué no confiaba en él para contarle lo que le pasaba. Al final, los dos sentían un dolor indescriptible.

Si pudieras pedir un deseo, ¿qué pedirías? Guillermo desearía sin pensarlo dos veces una máquina del tiempo para volver meses atrás. Ojalá y pudiera hacerlo, en verdad.

En definitiva; quien dijo que el amor tenía barreras no conocía la realidad. Perfectos, imperfectos, ¿qué importaba? Eran un complemento ya, se querían, y quien no pudiera notar que aquel amor era de verdad -y podía sobre pasar barreras-, ese sí que era un verdadero ciego. - «Nana.»