juncopie
Lo miró como quien ve una estrella fugaz,
breve, distante, imposible de atrapar.
Lo pintó con trazos que no eran verdad,
colores hermosos, pero sin mirar.
Él hablaba en susurros, cuidando el temblor,
el otro reía, pintando el amor.
Se encontraron sin prisa, sin rumbo, sin plan,
entre salas vacías y tardes de pan.
Él buscaba ser visto, no sólo admirado.
El otro buscaba lo nunca alcanzado.
Y aunque fueron promesa, pincel y canción,
también fueron sombra, silencio y presión.
No siempre quien ama recibe igual.
No siempre lo dulce se queda al final.
Fueron casi, fueron todo, fueron casi sin querer.
Y ahora sólo buscan... cómo no desaparecer.