Etzio ha construido muros para sobrevivir. Mia ha aprendido a huir antes de arriesgar el corazón. Ninguno cree en promesas, en los "para siempre"... ni mucho menos en los finales felices. Pero entonces se cruzan. No por casualidad, sino por una jugada del destino -o quizás de la vida misma- que decide juntar a dos almas rotas en el momento exacto. Entre silencios que duelen, miradas que tiemblan y heridas que aún sangran, descubren que el amor no siempre llega gritando... a veces susurra. Y aunque da miedo -porque amar de verdad da miedo- con la persona correcta, vale la pena. Una historia sobre sanar, confiar y volver a elegir. Porque lo que más nos asusta... a veces es justo lo que más necesitamos.