headlinerz
Dicen que hay amores que nacen para quedarse,
y otros... que solo nacen para doler.
Seokmin lo supo desde el primer instante:
amar a Mingyu era como mirar al sol: Hermoso, inevitable, y destinado a quemarlo todo.
Entre miradas que callan lo que el alma grita
y silencios que pesan más que mil palabras,
los dos se arrastran entre lo que sienten
y lo que nunca podrán tener.
Porque a veces el amor llega tarde.
Porque a veces el amor no basta.
Y porque hay historias que solo florecen en los sueños,
o, tal vez,
en otra vida.