_-_dragat_-_
Era un mito común, una idea errónea, como quieran llamarlo, que todos los vampiros eran ricos. Sobre todo porque Tommy, desde luego, no lo era.
Era dueño de una propiedad: un almacén destartalado con espacio justo para todas sus provisiones mientras dormía en las balsas, y lo arregló él solo. Era viejo, destartalado y polvoriento (parecía que estaba describiendo a su exsacerdote), pero se esforzó para que fuera suyo.
El Vampiro compró la cantidad mínima de sangre necesaria para funcionar semi-energizado y no poseía una sola pieza de tecnología.
Sin embargo, eso último tenía matices. Cosas como no querer estar en la lista negra de nadie. Los vampiros eran unos canallas, y además, entrometidos. Si una de ellas -o, mejor dicho, un aquelarre- descubría que era un vampiro solitario, estaría perdido.
Pero Tommy fue cuidadoso y su vida fue pacífica.
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OOORRRRR: Tommy, un polluelo solitario que solo intenta vivir, queda en el radar de SBI.