YamilaMarlenHolman
Prólogo
Maternar en soledad no es solo criar sin compañía. Es sostener cada día con el cuerpo cansado y el alma llena de amor, aunque a veces también de dudas, de miedo o de silencio. Es ser abrigo, alimento, consuelo y guía. Es estar ahí, siempre, incluso cuando no hay nadie más.
Este libro nace de mi propia experiencia: la de una maternidad vivida sin red, sin pausa, sin garantías. Con tres hijos, uno de ellos con una condición neurológica, aprendí a reinventarme en medio de la tormenta, a encontrar belleza entre las grietas, a florecer incluso en la oscuridad. Porque, aunque la soledad pesa, también enseña. Y porque descubrí que, al nombrarla, muchas otras voces empiezan a responder: yo también.
No estamos tan solas como parece. Este libro es testimonio, refugio y puente. Es para vos, que quizás no tenés a quién contarle el cansancio. Para vos, que sostenés el mundo con tus manos, aunque nadie lo note. Y para todas las que necesitamos recordar que maternar solas no es fallar: es resistir con amor.
- Yamila Holman