Era tanto el amor que le tenía la Luna al Sol que se dejaba morir cada amanecer para verlo nacer. Versión original 2015. Reeditado en el 2021. Todos los derechos reservados.

'No soy una chica normal, ninguna chica de mi edad tiene una vida como la mía...ninguna se dedica a las apuestas tan jóvenes como yo'- Charlie. Charlie o Charlotte como odia que le llamen es una chica de 19 años que va al instituto como cualquiera chica de su edad, sale con sus amigos, le gusta ver películas, ir de compras... Lo que la hace especial es que lleva una doble vida. Por la mañana es una estudiante normal pero por la noche, encima de sus tacones y en sus coches de lujo se dirige a los casinos mas cercanos dispuesta a ganar dinero con sus trucos. Cuando era joven tuvo problemas que le hicieron tener que tomar medidas desesperadas, como ir a casinos ilegales todas las noches para poder vivir, cosa que ya se ha vuelto una rutina. Aparte de que su mayor problema fue la muerte de sus padres cuando ella apenas tenía 15 años, de lo que se siente culpable. Hasta que claro, como toda chica, encuentra a alguien que le pone la vida patas arriba.

Nathan y Abie tienen una relación que pocas personas entienden y de la cual pocas personas tienen constancia. Ambos han sufrido mucho a pesar de que son jóvenes. Cuando Abie era pequeña fue abandonado por sus padres y tuvo que estar en una casa de acogida hasta los 17 años. Por otro lado, la madre de Nathan murió cuando el tenía 8 años, su padre lo dejo en casa de sus abuelos y se marchó. Ninguno de los dos han tenido suerte para relacionarse con los demás. Pero ambos tienen algo que muchos desean, un físico que muchas personas buscan en la cirugía. Abie apesar de ser baja de estatura tiene una piernas estilizadas, un pelo cobrizo casi pelirrojo que cae en cascada por su espalda y unos grandes ojos en los que cualquiera podría encontrar su perdición. Nathan es un chico alto, moreno,con ojos miel acompañado de unas pestallas que más de alguna chica desearía para ella. Encontraron en el otro desconfianza, tristeza, peligro y locura. Pero se dieron lo que necesitaban, sexo.

No importa cuánto sienta que le tiemblan las piernas con su cercanía o lo mucho que su corazón se acelera ante el sonido de su voz, ha aprendido la lección. Allá donde va él, ahí es donde comienzan los problemas. Historia con escenas sexuales explícitas, violencia y lenguaje soez. Recomendado para público maduro [+18].