"La primera vez que lo vi sabía que lo quería para mi, pero que no podía tenerlo". La historia de como me enamoré de un desconocido. Obra Registrada en Safe Creative. #4 Lejos #5 Correspondido #46 Autoestima #85 Corto #86 Desconocido #145 en Historia Corta (20/09/2015)

Basado en hechos reales.™

Muchas veces nos paralizamos ante una situación adversa o algo que no estaba en nuestros planes, nos desesperamos, y todo lo vemos mal, pensamos que estamos a contramarcha del mundo. Primero debemos aceptar la realidad que nos toca. El tiempo se encarga solo de acomodar las piezas de nuestras vidas. En todo debemos saber esperar, convencidos de que LO MEJOR ESTA POR VENIR. No dejes que el dolor te enceguezca, nunca estás solo: no te compares solo hacia arriba, mira abajo y entenderás que Dios tiene un proyecto especial para vos, sólo que a veces las cosas no suceden con el tiempo que deseamos. Aprende a esperar, pero fundamentalmente, con esperanza de que las cosas van a mejorar. Tú decides como quieres afrontar el día de hoy : o te resignas a morir un poco más, pensando que todo esta mal, o te decides a vivir un poco más, sabiendo que LO MEJOR ESTA POR VENIR.

Ella sabe matar al amor, si la necesitas llámala. Te ayudará.

Esmeralda, una joven de 16 años, vivia con sus padres .Era una familia rica .

"Quizá no era amor, tal vez, era esa pequeña necesidad de sentir algo diferente. Algo que marcara mi vida por un momento"

Cuando nadie te quería, yo te escribía. A. G.

¿Donde estamos?

"A veces me imagino siendo la clase de chico perfecto que tanto andas buscando. Pero luego recuerdo en lo ridículo que me vería y que posiblemente mi único propósito en esta vida es destruir las expectativas de una ilusa chica con dieciocho años, de la cual estoy profundamente enamorado" "Así que decide, ¿pretendes seguir buscando a ese maldito Príncipe Azul que tanto crees merecer o te conformas con el extraño y esquizofrenico chico que tanto te ama?"

Ahinoa sabe que debe prepararse emocionalmente para lo que viene, para despedirse. Nunca es fácil decir adiós, pero esta vez, más que nunca, duele demasiado. Y no queda más remedio que aceptarlo. No hay vuelta atrás.