Cuando James Allen nació, fue catalogado como una rareza por una sociedad que jamás supo entenderlo, pese a que él no hizo esfuerzo alguno por ocultar su excentricidad, especialmente cuando su pasión por la taxidermia bastó para que lo llamaran lunático y lo excluyeran del mundo de los matrimonios decentes. No importaba, no hasta que la guerra lo dejó sin propósito. Entonces, unas cartas inesperadas llegaron a sus manos y lo llevaron a entender que había llegado el momento de buscar a su futura esposa: a su mariposa azul. No obstante, al encontrarla, deberá decidir si cortejarla o protegerla desde la distancia. Porque Casandra Collins, con una alegría no reflejada en sus ojos sin vida, parecía ser una luz inalcanzable cuando en realidad, ella también vivía en la oscuridad, al igual que él. *PRIMER BORRADOR*

Cada cien años, se le concede un mes de existencia. Una fracción de tiempo entre siglos de hielo, para mantener la ilusión de que pertenece a la poderosa familia de los Inmortales. El único defecto de Sibia, nació sin don. En un mundo reconstruido tras el colapso, donde los clanes se rigen por dones extraordinarios, secretos ancestrales y alianzas silenciosas, Sibia es un error que todos intentan ocultar... incluso aquellos que dicen quererla. Pero esta vez, algo cambia.En el momento en que vuelve a encontrarse sola en la inmaculada sala de crionización, como lo ha hecho tantas veces antes, todo parece seguir el mismo guion: preparar la cápsula, activar los sistemas, cerrar los ojos y desaparecer durante cien años. No obstante, justo antes de pulsar el botón que abriría su sarcófago de cristal, algo la detiene. Un temblor. Una intuición. Un "no" que no necesita palabras. Y entonces, sin pensarlo, corre. Corre sin mirar atrás. Sin saber adónde va. Solo sabiendo que, esta vez, no va a volver a dormir.