Gabriel, un joven de veintiún años, abandona Medellín con el corazón dividido: entre la nostalgia de sus padres y el deseo de conquistar los cielos como parte de la Fuerza Aeroespacial Colombiana. Mientras las aves vuelan libres sobre su despedida, él carga con el peso de las lágrimas de su madre y el abrazo inusualmente cálido de su padre. El servicio militar lo enfrenta a un entrenamiento feroz que le roba el aliento y lo obliga a descubrir fuerzas que no sabía que tenía. Allí, entre noches frías y cielos infinitos, encuentra un hermano en Daniel, su compañero de vuelo, con quien comparte fatiga, miedo y la emoción incomparable de cortar el aire en una aeronave. Durante dos años, las cartas que envía a su familia son testigos de su esperanza y de los atardeceres que observa desde lo alto. Pero en su undécima misión, el destino se tiñe de fuego y silencio: un destello, un impacto, y la certeza de que su última carta puede no llegar jamás. Una narración íntima y poética sobre un joven que sueña con volar, aun sabiendo que en cada vuelo deja parte de su corazón en tierra.