«¿Qué haces en mi casa?» «Soy la nueva niñera de tu hermana.» Cuando Victoria ya no puede cuidar a Isabella por las tardes, recomienda a su mejor amiga para el trabajo. _____ necesita el dinero, aunque no quiere reencontrarse con Alan Arrieta, el hermano mayor de la niña...y su archienemigo desde la primaria. Es un simple trabajo, cuidar a Isabella será fácil, lo difícil será convivir nuevamente con su hermano.

⌗ 𝐌𝐚𝐫𝐜𝐨𝐬 𝐕𝐢𝐥𝐥𝐚𝐥𝐨𝐛𝐨𝐬 𝐅𝐚𝐧𝐟𝐢𝐜 ✩°｡🎤 ╰┈➤ Donde Samantha y Marcos se conocen por amigos en común y empiezan a sentir cosas por el otro @spammafbaby | 2025🫧༝༚༝༚

𝐁 | ❛you ain't my boyfriend (boyfriend)and I ain't your girlfriend (girlfriend) but you don't want me to see nobody else and I don't want you to see nobody ❜

Solo dame permiso y yo te bajo el cielo 🤍

₊˚.༄ ࿐*:･ﾟ Beautiful, crazy She can't help but amaze me The way that she dances Ain't afraid to take chances And wears her heart on her sleeve Yeah, she's crazy But her crazy's beautiful to me. Carol Castro no buscaba el amor. Después de lo que pasó con Memo, había decidido enfocarse en lo suyo: en ser mamá para Arturito, en cuidar de Laura, en su casa de Guadalajara. El amor, simplemente, ya no estaba en sus planes. Pero el destino la llevó a Austin, Texas, para acompañar a su hermana en la universidad... y fue ahí donde lo conoció. O mejor dicho, chocó con él. Un vaquero altísimo que le tiró el café encima y que desde ese día no ha podido sacarse de la cabeza. Pablo Zolezzi. 25 años. Sonrisa fácil, botas gastadas, y esa forma de mirarla como si su caos fuera lo más fascinante del mundo. Ella es impredecible, a veces cambia de opinión en el último segundo, se desvela viendo series y vive con el corazón en la mano. Él lo sabe: Carol está loca. Loca, hermosa. Y justamente por eso, es imposible no enamorarse.

𝐒 ━━ ❝ Todo el día pegado al phone mandándote corazones. Me dicen: "No te enamores", pero es tarde ya ❞ Todo comenzó con un live cualquiera... Carol estaba en el teléfono con Aldo, tirando desmadre en pleno en vivo, cuando Laura apareció al fondo, dejando unas cosas en la sala. -Ey, ey, ey... ¿y esa morra de atrás? -preguntó Marcos, acercándose al cel de Alan con la ceja levantada. Y ya con eso bastó. Un comentario. Una mirada. Un mensaje. Y todo cambió. Lo que empezó como broma se volvió costumbre. Y sin darse cuenta... ya se estaban mandando corazones.