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En Monterrey, la ciudad se divide en dos colores: azul y amarillo.
Gerardo Arteaga, el nuevo orgullo de Rayados, y Diego Lainez, la estrella de Tigres, al principio no se llevaron bien. Pero el destino los une otra vez, dentro y fuera de la cancha.
Entre miradas, rivalidad y sentimientos que no deberían existir, descubrirán que el fuego más peligroso no se enciende en el estadio... sino en el corazón.
🔥 Rivalidad, drama y amor en el Clásico Regio.
"Entre Rayados y Tigres, el corazón también se juega"