Peyton Hamilton, la hermana de la leyenda de las pistas Lewis Hamilton, lucha por encontrar su propio camino entre las luces y sombras. Lando Norris, el joven y talentoso piloto de Fórmula 1, se enfrenta a un desafío inesperado por parte de su equipo. ¿Qué sucede cuando una fiesta cambia el rumbo de sus vidas de manera irreversible? ¿Cómo pueden dos amigos mantener las apariencias mientras los secretos se esconden en cada mirada y sonrisa compartida? El amor y la velocidad se fusionan. Los corazones de dos almas que están destinadas a estar juntas. ¿Podrán mantener su farsa sin tropezar en sus verdaderos sentimientos, o se atreverán a aceptarlos y cambiar el rumbo de su destino?

Hay historias que no se cuentan en línea recta. Porque el amor, cuando vive en medio del ruido, los flashes y la precisión de un cronómetro, nunca corre limpio. Se llena de interferencias, miradas ajenas, de gente que no fue parte pero insiste en aparecer. Elizabeth no llegó al paddock para enamorarse, ni por fama ni para encajar. Llegó porque su presencia vale por sí sola. Lo que construye no depende de focos ni favores. Ella llegó con trabajo, precisión y una humanidad que no aparece en titulares. Lando estaba en lo alto. Fama, victorias, sonrisas entrenadas. Pero detrás del piloto había un chico que encontró en Ely algo que no se compra: alguien que lo miró como si no fuera una figura, sino una persona. Y eso lo cambió. Lo que nació entre ellos no fue decorativo. Fue real, profundo e incómodo para quienes viven del espectáculo. No necesitaba plano ni aprobación. Justo por eso, incomodaba. Mientras Ely enfrentaba el miedo al abandono y la necesidad de demostrar que no está donde está por casualidad, Lando buscaba proteger ese espacio donde podía ser él sin actuar. Ella convertía los golpes en impulso. Él aprendía que amar también implica correr distinto. Y aunque el camino duela, aunque las guerras se escondan tras el trabajo, y aunque el circuito parezca cada vez más hostil... hay cosas que no saben perder. Esta, sin duda, es una de ellas. Versión de "Solo Tú" en fanfiction.

Lance Stoll es piloto de Fórmula 1. Tiene fama, privilegios y un apellido que pesa más que cualquier trofeo. Aylen Torres es argentina, fanática de la F1 desde chica, y acaba de ganar un concurso para vivir el Gran Premio de Canadá con acceso exclusivo al paddock. El problema: el premio es con el equipo Aston Martin, y detesta a uno de sus pilotos. Justamente, Lance. Él no entiende por qué ella lo trata con tanta frialdad. Ella no piensa disimular lo que opina de él. Pero a veces, las vueltas más inesperadas no están en la pista. Están fuera de ella. ▦▦▦▦▦▦▦▦▦▦ Historia con la mayoría de capítulos cortos. Historia completamente mia. No se permiten copias total o parcial de la historia. Antes de escribir esta historia me asegure de que no haya ninguna con la misma trama.