IAM_Laurixta
En Atalanta un pueblo remoto rodeado por bosques densos y cielos eternamente grises, los niños comienzan a desaparecer sin dejar rastro. No hay evidencia de su existencia: las fotografías se desvanecen, sus nombres desaparecen de los registros escolares, y sus pertenencias se combierten en polvo. Pero lo más aterrador es que los adultos recuerdan cada detalle de ellos: el sonido de sus risas, los abrazos, las discusiones... Todo.
Los habitantes viven atrapados en un terrible duelo y negación, fingiendo que todo está bien mientras el peso de la perdida amenaza con quebralos. Nadie habla abiertamente de los niños, como si nombrarlos pudiera hacerlos desaparecer de sus memorias también. Nadie, excepto Gia, una joven que regresa al pueblo tras años de ausencia, buscando respuestas sobre su propio hermano menor, desaparecido en circunstancias similares cuando era niña.
Gia se enfrenta a un muro de silencio colectivo, pero también a pequeñas grietas: sus viejos vecinos susurran nombres al viento, las madres lloran frente a cunas vacías, y los ancianos cuentan historias sombre algo que ha acechado al pueblo durante generaciones. Con la ayuda de un viejo diario que parece registrar la existencia de los niños antes de que desaparezcan, Gia empieza a desentrañar un terrible secreto: el pueblo no sólo pierde a sus niños, si no que el recuerdo de ellos atare algo que se alimenta de su dolor.
Para salvar lo que queda de los niños y del pueblo mismo, Gia deberá enfrentarse al abismo de sus propios recuerdos: ¿Puede luchar por los que a perdido sin perderse a su misma en el proceso?