ttthinkaboutz
Sin sospecharlo, Rin bebió aquello que Bachira le había ofrecido. El sabor era extraño, difícil de identificar, pero no hubo tiempo para cuestionarlo. En cuestión de segundos, un polvo blanco y escarchado surgió de la nada, envolviendo por completo a Rin como una niebla helada. Cuando el fenómeno se disipó, él seguía allí, intacto, aparentemente igual que siempre.
Sin embargo, algo no encajaba.
A sus pies, donde antes no había nada, se encontraba un intruso imposible: una versión miniatura de sí mismo, viva, consciente y tan real como inquietante. No era una ilusión ni un efecto pasajero, sino una presencia tangible que lo observaba con la misma expresión que él veía cada mañana en el espejo.
Ahora, enfrentado a esta absurda y desconcertante realidad, Rin no solo debía entender qué había ocurrido, sino también hacerse cargo de su propia réplica diminuta, cargando con una responsabilidad tan inesperada como inexplicable.