Amaia Otxoa juró que jamás volvería a Donostia. Después de que su abuelo, el magnate Julián Otxoa, desterrara a su madre y a ella para casarse con otra mujer, Amaia construyó una vida lejos del lujo y la hipocresía, sobreviviendo en un piso compartido en Madrid. Pero la muerte tiene la mala costumbre de desenterrar el pasado. Tras el fallecimiento de su abuelo, Amaia se ve obligada a regresar al imponente palacete familiar en Hernani para la lectura del testamento. La herencia es millonaria, pero la cláusula para recibirla es una trampa mortal: debe pasar el verano entero conviviendo en la mansión con la mujer que destruyó a su familia y sus dos "nietos perfectos". Iñigo: el heredero frío, calculador y arrogante que la ve como una intrusa. Mikel: el tenista rebelde y seductor que parece ocultar más sombras que luces. Lo que empieza como un verano de tensión y odio se transforma en una pesadilla cuando un cadáver aparece en los terrenos de la finca. Atrapada entre la lluvia incesante, secretos familiares oscuros y una atracción prohibida que no debería sentir, Amaia descubrirá que en la familia Otxoa, la sangre no solo une... también mancha. ¿Podrá sobrevivir al verano o se convertirá en la próxima víctima de la herencia?