Antes de que Lee Jung-jae se convirtiera en un nombre que llenaría cines, solo era un muchacho que limpiaba tazas en una cafetería de Apgujeong, sonriendo a desconocidos mientras soñaba con una vida que parecía inalcanzable. Fue allí donde conoció a Lee Byung Hun, un joven actor que recién había comenzado a probar el sabor de la fama.

-Hey, sirveme agua. -No soy tu sirviente.

Gi-Hun e In-Ho fueron pareja durante la preparatoria, una relación soñada con la que todo el mundo fantaseaba. Todo fue de maravilla hasta que, en la fiesta de fin de año, In-Ho le fue infiel a Gi-Hun con una chica. La noticia no tardó en llegarle a Gi-Hun, quien, con todo el dolor del mundo, decidió terminar la relación. Cuatro años después, Gi-Hun estaba rumbo a una entrevista de trabajo en una gran empresa, sin saber que el jefe del lugar era su ex pareja de la preparatoria, Hwang In-Ho. En esos cuatro años, Gi-Hun se había casado y había tenido una niña: Seong Jun-Hee, que ahora tenía dos años. Sin embargo, se había divorciado de su esposa porque las cosas no funcionaron. Por su parte, In-Ho había dejado embarazada a la chica de la fiesta, pero, apenas nació el niño, ella lo dejó con In-Ho y desapareció, convirtiéndolo en un padre soltero de un niño de cuatro años.

La vida se reduce a una sola cosa: cambio, y Hwang In-ho lo entiende mejor que nadie.Por más de 7 años ha trabajado como fotógrafo privado para las personas más influyentes del país y por más de que las personas que lo rodean piensan que lo tiene todo, a el le hace falta esa musa que tanto tiempo lleva buscando para que sus fotografías tengan ese toque suyo que tanto impresiona a la gente. Seong Gi-hun, un rebelde carismático con una sonrisa radiante y amante del skate, vive su juventud como nadie, al ser libre de las expectativas que su familia le imponía al ser el primogénito y futuro dueño de SEO Factory, una de las empresas más conocidas en todo Seúl. Al entregarle el puesto a su hermano, Sang-woo, es libre de hacer lo que quiera, y una de sus cosas favoritas es ir al centro de patinaje, dónde los mejores skaters van a hacer lo que más aman. Ambos no pueden ser tan diferentes, pero al mismo tiempo tan parecidos, ¿Podrá el amor surgir entre dos personas de mundos totalmente distintos? ¿O esos mundos serán los causantes de la destrucción de esa chispa creciente en el interior de ambos?

In ho el agente más buscado y atractivo de todo Corea,después de ser contratado para ser un guardaespaldas de una persona difícil de enamorar,dominar y seducir. ¿Quien será esta "Difícil" persona de la que tanto hablan? ______________________________________________________ Fanfic +18 ⚠️Advertencia⚠️ •Fanfic +18 •Lenguaje inapropiado •Palabras no aptas para todo público ⚠️Si no te gusta este tipo de fanfics te puedes ir, respeto gustos y decisiones⚠️ ⚠️Nada de esto es real y recuerden que sólo es contenido no buscó ofender a nadie⚠️

Años han pasado desde que todas estas emociones aparecieron... Y todas ellas parecen estar intactas, a pesar del tiempo y la distancia que se interpuso entre ellos. Solo bastó un segundo para que los pensamientos y sentimientos pasados, despertarán de ellos con la misma intensidad y fuerza que antes. Pero con la diferencia de que todo esto crecía incontrolablemente con él pasar de los meses, volviéndose aún más fuerte e innegable que nunca. Sin duda alguna, estos fuertes deseos secretos que guardaban en los mas profundo de ellos, seguían latentes como el dolor de una herida que no puede sanar. Aunque se encontraran dentro o fuera del set, ellos se sentían atrapados en estas sensaciones que ya son imposibles de ignorar. Y aunque Lee Jung-jae había decidido guardar silencio, Lee Byung Hun ya no estará dispuesto a callar más. Una noche... Solo una noche necesitaba... Y todo esto cambiaría para ambos. ¿Esta será la decisión correcta? ¿Será el momento adecuado? ¿Todo estará bien después de esto? Aún no lo sabe, pero toda esa angustia, duda e incertidumbre por fin se terminará... Entre Confesiones Y Entrevistas

- Te dije hacé mucho tiempo qué era incapaz de amar. Un Omega inteligente me habría creído. - La voz de In-ho era dura y distante hacia Gi-hun. - No puedo evitar lo que siento por tí. Te amo desde que era un niño. - Lo podía sentir, tenía un nudo en la garganta. - En ése caso. - masculló él con la misma frialdad de antes. - está noche vas a madurar a la fuerza. Gi-hun contuve el aliento; aquellas palabras le habían provocado un dañó casi físico, pero fué más psicológico. Se le llenaron los ojos de lágrimas y contuve un débil sollozo que amenazó por salir. ~ Aclaración ~ ∆ Omega & Alpha ∆ ∆+18 ∆ ∆Epoca media : duques, duquesas, emperadores, condes, damas damiselas. ∆ ✨ mundo omegaverse ✨

Una historia de amor donde un omega y un alfa juran amarse, protegerse y encontrarse en un futuro si algo les llega a separar, una promesa hecha en un campo lleno de gardenias. Dónde Gi-hun y In-ho dos jovenes adolescentes se enamoran en el momento adecuado pero en el tiempo incorrecto, oh es a lo que a ellos le decían, cuando en realidad su amor era más puro y fuerte que cualquier tiempo. ¿Será que ellos puedan cumplir su amor?. 🍂Aclaraciones: Personajes no míos, son originarios de la serie llamada "Squid Game", todos los derechos de personaje y nombres son totalmente de la serie. Inicio: Final:

Cuando Gi-hun es contratado como secretario del presidente de Squid Corporation, su mundo se pone de cabeza al enamorarse de su jefe. Sin embargo, este ni siquiera lo voltea a ver si no es para asuntos de la empresa, por lo que Gi-hun comienza a idear un plan para conquistar a su jefe. 📍 Universo alternativo (no existen los juegos). 📍 LOS PERSONAJES NO ME PERTENECEN.

In-ho era, para muchos, un enigma con piernas largas y una sonrisa peligrosa. El alma de cada fiesta, capaz de encender el ambiente con un simple chiste. Tenía esa clase de encanto natural que hacía que las chicas lo siguieran con los ojos y se rieran de cosas que, en boca de cualquier otro, sonarían absurdas. Peleador de MMA en sus ratos libres, sosteniendo la disciplina y adrenalina en el mismo cuerpo. Pero en la escuela, frente a los maestros y, sobre todo, delante de sus padres, era otro. El hijo ejemplar, el alumno aplicado, el chico que levantaba la mano con respuestas siempre correctas y que recibía elogios por su responsabilidad. Era querido por todos. Su doble vida era un secreto tan bien cuidado que parecía natural. Gi-hun, en cambio, nunca supo fingir. Tenía problemas con las matemáticas desde el primer año y sus notas eran el reflejo de un esfuerzo que nunca alcanzaba. Los números lo atormentaban, los problemas de física eran un muro que no podía escalar. Pero nada de eso le importaba demasiado, porque su mundo giraba alrededor de otra cosa: la música. Con una guitarra colgando al hombro y callos en las yemas de los dedos, Gi-hun soñaba con formar una banda, con subirse a un escenario y perderse en los acordes. Era su única meta clara, el fuego que lo empujaba a seguir adelante aunque todo lo demás se le escapara de las manos. Lo curioso era que ambos habían caminado por los mismos pasillos durante toda su vida. Desde el jardín de infantes hasta la secundaria, compartieron clases, patios y recreos. Pero nunca cruzaron palabra. Eran dos planetas girado en la misma órbita sin tocarse, cada uno demasiado ocupado en su propio universo. Hasta que un pequeño accidente (de esos que parecen insignificantes al inicio) y un proyecto escolar para el fin de año cambiarían esa distancia. El destino, caprichoso, los obligaría a mirarse, a descubrirse, y a compartir algo más que los corredores de la escuela.