Lissy vivió toda su vida escuchando a sus padres decirles que tenía que ser perfecta y mejor que los demás, cuando ella solo buscaba vivir libremente sin la presión de las expectativas de todos. Nunca se atrevió a confiar en nadie más que no fuera ella, es por ello que en su primera relación no se atrevió a ser ella misma por lo cuál cometió muchos errores.... Ella era así, se arrepentía después de haberlo hecho y había algo que siempre le impedía pedir perdón, después de todo nunca lo había hecho, siempre trataba de echarle la culpa a otra persona cuando ella sabía que era suya No le gustaba la sensación de equivocarse Cuando finalmente ingresó a secundaria conoció a un chico que le hizo sentir cosas que nunca había sentido en su vida: CONFIANZA... Para ella esa palabra era sagrada, no era algo que podía dar así nada más pero con él fue diferente. El problema llegó cuando las personas que la veían como la chica perfecta empezaron a cuestionar la apariencia del chico y a decir que ella era mucho para él y él muy poco para ella. A ella que nunca le había importado las apariencias de los demás sino los sentimientos, empezó a cuestionarse sí debía continuar su historia con alguien que le proporcionaba confianza o hacerle caso a los comentarios de los demás y seguir siendo la chica perfecta... Pero no todo era decisión de ella... A veces no conocemos a una persona del todo y puede a llegar a hacernos tan bien pero tan mal a la vez... Y sí, el chico nunca fue como lo imaginó.

Juliana es una chica que siempre aprendió a ocultar lo que siente, no porque quiera, sino porque fue la forma que encontró para sobrevivir. Creció viendo a sus padres pelear, escuchando palabras que no eran para una niña y con los años, eso la convirtió en alguien seca con casi todos. Casi... La única excepción es Rouse, su mejor amiga...la persona frente a la que no necesita fingir fuerza Pero todo se complica cuando el primo de Rouse, Gael, llega a la ciudad para quedarse unas semanas... Juliana jura que no va a enamorarse, que no es el momento y que no es para ella Que ya aprendió suficiente Solo que el corazón no siempre obedece a lo que la cabeza promete.

Nunca supe en qué momento acepté que querer también podía doler. No fue una decisión...fue costumbre. Ian llegó primero y me enseñó a conformarme con migajas que parecían suficientes cuando no conoces algo mejor. Y entonces llegó Axel. No para salvarme. No para arreglarme. Llegó a desordenar lo poco que tenía en orden. Dicen que el amor verdadero se siente en paz, pero...nadie habla del miedo que da cuando alguien te mira y no se va. Lo nuestro nunca fue nada. Eso decía para convencerme. Pero si no fue nada... ¿por qué todavía duele?

Aria está intentando sanar después de una decepción con Elías. Justo cuando comienza a sentirse mejor y conocer a Liam, su ex regresa arrepentido y queriendo recuperarla. Mientras Liam empieza a enamorarse de ella, Aria queda atrapada entre lo que conoció y lo que podría ser algo nuevo y bonito.... Su problema no es elegir a un chico, sino descubrir qué es lo que ella realmente quiere.