En un mundo donde las sombras gobiernan tanto a los mortales como a los inmortales, Selene Watson nunca encajó. Creció entre los salvajes y honorables licántropos, ajena a los secretos que corrían por sus venas. Su piel pálida y su incapacidad para transformarse la marcaban como diferente, pero nadie le decía la verdad: que su sangre era un eco prohibido de dos mundos que jamás debieron mezclarse. Cuando el Consejo de Sangre, una élite vampírica que manipula a la humanidad desde las sombras, descubre su existencia, Selene se convierte en el centro de una cacería implacable. Su linaje híbrido podría desestabilizar el frágil equilibrio entre las bestias de la luna y los señores de la noche. Perseguida por quienes desean borrarla del mundo y protegida en silencio por Lucien, un vampiro marcado por el amor y la traición, Selene deberá enfrentarse a los secretos que han intentado ocultarle. En su lucha por la verdad, descubrirá que la sangre olvidada guarda un poder que podría salvarla... o condenarla para siempre. Entre bosques oscuros y mansiones góticas, entre la lealtad de los licántropos y las maquinaciones de los vampiros, Selene deberá decidir si el destino es algo que se acepta... o algo que se enfrenta.

En un mundo donde los mortales y los dioses conviven bajo sombras de secretos y pasiones prohibidas, Lía, una joven que solo busca dejar atrás un pasado doloroso, se ve atrapada en un juego mortal. Un antiguo amuleto, cargado de un poder más allá de su comprensión, se convierte en su única protección... y en el objeto de deseo de fuerzas que no debería haber despertado.
 Cuando un misterioso hombre de ojos oscuros irrumpe en su vida, Lía siente que algo cambia. Lo que parece una conexión inexplicable la lleva a descubrir verdades que podrían destruirla, mientras se enfrenta a intrigas donde la traición acecha tras cada esquina. Sin embargo, en un mundo lleno de enigmas y reglas divinas, las emociones humanas son las más peligrosas.
 Entre misterios, traiciones y un amor que desafía el destino, Lía deberá decidir a quién confiar su corazón... y su vida. Con un romance lento y lleno de drama, "El amuleto de los dioses" es una historia sobre la imposibilidad del amor, la obsesión, y cómo incluso los dioses pueden caer ante los caprichos del destino.

En un reino donde los dragones y los humanos mantienen un frágil equilibrio tras siglos de disputas, Alice Bronson llega a la prestigiosa academia de jinetes con la esperanza de cumplir su sueño de convertirse en sanadora. Pero el destino parece tener otros planes. Contra todo pronóstico, es elegida como jinete, vinculándose con Eryndor, un majestuoso Dragón Blanco cuyas cicatrices cuentan historias de una guerra olvidada. Mientras Alice lucha por aceptar su nuevo papel, los sueños que la atormentan desde su infancia comienzan a cobrar sentido. Ecos de un pasado lleno de magia y rebelión resurgen, recordándole que los legados no solo se heredan: también se repiten. Con cada prueba en la academia, Alice descubre que su conexión con Eryndor podría ser la clave para desentrañar secretos que muchos preferirían dejar enterrados. A medida que las sombras del pasado se alzan nuevamente, Alice se encuentra atrapada entre las expectativas de un futuro que nunca quiso y la responsabilidad de un linaje que apenas empieza a comprender. Pero el destino no perdona la indecisión, y pronto deberá enfrentarse a una pregunta crucial: ¿está dispuesta a luchar por un equilibrio que otros han dejado atrás? "Entre el cielo y el legado" es una historia de magia, sacrificio y el poder de los sueños que conectan el pasado con el presente. Perfecta para quienes buscan fantasía cargada de misterio y emociones profundas.

••• C O M P L E T A D A ••• - ¿No sabes quien soy? - se señalo con un deje ofendido en la voz al tiempo que me miraba con descarado deseo. - Soy Eros, Dios del sexo y del amor, y por todo este mes... todo tuyo. Derechos reservados. Di NO al plagio. Portada hecha por mi

- No tienes ni idea de con quien te estas metiendo. - le gruñí al vanidoso Dios Griego que me miraba de forma condescendiente. Aun desde mi posición detrás del cristal que me mantenía encerrada pude sentir el odio bullir en mi estomago, manteniéndome caliente. - Te odio y cuando salga de aquí me encargare que seas tu el que este en esta pecera. Los ojos de Poseidón centellara divertidos ante la idea y mi enojo solo se incremento. El odioso hombre se acerco a mi tanque de agua y recargo su dedo indice contra el cristal, de tal forma que si pudiéramos tocarnos me habría rozado la mejilla, sus ojos no se perdieron detalle de mi expresión iracunda y su rostro jamas dejo la burla y el desafío, haciéndome desear poder castrarlo con el pensamiento. - Quisiera verte intentarlo, dulzura. ......... ........................... Es necesario leer la novela "Querido Eros" para no tener spoilers <3 Portada hecha por mi :3 ••DI NO AL PLAGIO••

- De verdad no me tienes miedo - murmuró Hades con un tono sorprendido que me hizo estirar una esquina de mis labios en una sonrisa irónica. -¿Por qué debería? - susurré observando sus ojos brillar rojos unos instantes antes de volver a su tono oscurecido habitual. - Porque podría quebrarte con un chasquido de mis dedos. - dijo con la voz endurecida - podría hacerte gritar por piedad tan fuerte que tu voz no volvería jamás, y aquella encantadora luz en tu mirada se extinguiría para siempre. - su mandíbula se apretó antes de desviar su mirada - porque una parte de mi siempre va desear consumirte, hasta asegurarme que seas solo mía. Nada de aquello me sorprendía, ya sabía en lo que me estaba metiendo, lo supe desde la primera vez que lo vi. Lo que me sorprendió fue la expectativa, el desafío que corría por mis venas como la droga más potente. Así que alcé mi copa de ambrosía en un brindis. - Por nosotros. - dije. - los condenados. *ESTE ES EL TERCER LIBRO DE LA SERIE DE "QUERIDO EROS" recomiendo que se lea en ese orden para evitar SPOILERS!!* Portada hecha por mi Di no al plagio

De todas las posibilidades que contemple al escapar de casa, nunca me imagine un resultado en el que acabara en condiciones tan lamentables. Incluso considere que mi barco encallara y tener que recurrir al canibalismo para sobrevivir, y aun así, esta realidad me parecía mas petrificante. Levanté la cabeza ignorando los gritos de los hombres salvajes que levantaban su puño lleno de billetes, sus ojos pervertidos recorrían los cuerpos de todas las mujeres dispuestas en una fila horizontal con un letrero colgado de nuestros cuellos. Todo el lugar olía a una mezcla de licor barato que casi me hace desmayarme. Ojalá hubiera tenido la suerte, así no habría escuchado la voz clara de un hombre al empujarme con fuerza al tiempo que decía: - 500 libras por la chica vestida de marinero. - y los gritos llenaron la noche. || NO AL PLAGIO || Portada hecha por mi.

-¿Se está incendiando el edificio o por qué tocas mi puerta a las cinco de la mañana? -Mi nuevo vecino no parecía muy feliz con mi visita. Sin embargo, yo sentía babear al verlo en nada más que bóxer y el cabello desordenado por la cama. -¿Eres actor, verdad? -Pregunté yendo al grano antes de echarme para atrás, llevé una mano a mi boca cuando solté un hipo a causa del alcohol. -Sí... -Titubeó y cruzó los brazos mientras sus cejas se juntaban- Se puede decir que sí. ¿Hay algún problema o ha habido alguna que...? -¿Puedes entonces enseñarme sobre sexo? Porque sí, mi nuevo vecino era actor, uno del cine para adultos, y necesitaba urgentemente su ayuda si no quería terminar en la calle, soltera y con veinte gatos.

Soy el sucesor del rey. He regresado para tomar el poder, desde que nací me han preparado para esto, pero el hecho de estar aquí también tiene que ver con hacer pagar a aquellos que me humillaron, rebajaron y creyeron que no iba a sobrevivir, pero si algo me heredó mi madre fue fortaleza y mi padre la sed de venganza. Dicen que en la mafia no hay distracciones, eso lo dicen porque no conocen a la hechicera que me calienta la cama. Por desgracia no está a mi altura y solo me queda tomarla una y otra vez hasta saciarme.

Ella solo buscaba un trabajo normal, para seguir con su vida monótona. Para seguir creyendo que la rutina que tenía le hacía feliz. Pero no contaba con su amigo el destino, que le tenía preparado un poco de emoción a su aburrida costumbre.