Hoy podemos estar aquí, disfrutando de todo lo que nos llena con personas maravillosas, riendo a más no poder o incluso fingiendo estar bien cuando sabemos que por la noche nos rompemos y lloramos hasta quedarnos dormidos, que nos sentimos solos, que no podemos más; todas esas cosas que de una manera u otra nos hace saber que estamos vivos, que sentimos. Pero y ¿mañana? ¿qué puede pasar? ¿Cambiarán las cosas? Nunca se sabe lo que puede llegar a pasar pero todo cambia para bien o para mal, nada permanece de un manera o de otra, cambia. Las cosas cambian en un segundo, la gente cambia y muchas veces hay sueños y planes que se quedan en el intento por que no están destinados a pasar o por que tenemos miedo de luchar contra los obstáculos que se nos ponen delante, un miedo de estos de los que con el tiempo nos arrepentimos, pero en lo que estábamos son pequeñas cosas que hacen cambiar nuestro rumbo pero nosotros tenemos que ser conscientes de saber darle el giro que queremos para mejorar.