Él robó mi mano, mi libertad.
Mi vida siempre ha sido perfecta (bueno, tal vez no siempre. Casi) y todo se debe a la libertad que siempre me han otorgado para poder hacer todo. Comprar lo que yo quiero, gastar cuanto quiera, hacer fiestas como desee. Pero no todo en la vida es color rosa, el dinero se acaba al igual que el trabajo... Pero él tení...