Nehm is a half-blood fae girl who is friends with a werewolf called Zach. Is there anything else that needs to be said? No? Then the tragedy is served, you may dig in.

Alessandra tiene muchos problemas, entre los que se encuentran sus mejores amigos, Chad el lobo y Austin el humano, su abuela muerta que ahora la ronda, un vampiro poderoso que parece adicto a las orgías sangrientas y, cómo no, sus propios ojos. Sus malditos ojos de bruja. Y, no lo malinterpretéis, no es que solo tenga ojos de bruja, es que es una bruja de pura sangre. Maldita sea. Viviendo una doble vida como Cristy Phelps, preparándose para los círculos de brujas en los cual es una pieza clave, vigilando a un vampiro sediento de sangre y sobreviviendo a una vida sentimental con Chad y Austin, ¿podrá a salir viva de esta? Sinceramente, no lo creo.

- Dame una sola razón por la cuál no saldrías con ese tío. - Me reclamó June, de brazos cruzados. - No tiene nombre de mes del año. - Respondí, confiada. La única razón por la que me había hecho mejor amiga de June al principio era porque ambas nos llamábamos como meses del año (Junio y Abril), aunque luego descubrí que además de tener un nombre guay June tampoco era una mala tía. - ¿Qué? ¿A qué te refieres? - Preguntó, extrañada. - A Ares, no tiene nombre de mes sino de dios griego. - Expliqué, como si fuese obvio. Se empezó a reír exageradamente. - ¿Se puede saber qué te pasa? - Pregunté, molesta. - ¿Es que no lo sabes, April? Ares es Marzo. -

Louise Blacksmith es una chica de pueblo. En sus diecisiete años de vida no ha salido de su pueblo natal, no ha tenido más contacto con el resto de la humanidad que con los tres muchachos populares de su anterior instituto y su mejor amiga y jamás ha comido en un maldito McDonald's. Todo eso se acaba cuando finalmente y tras muchos esfuerzos logra una beca que la llevará de intercambio por dos años enteros a una gran ciudad en medio de un gran estado. Ella espera con ansias conocer a su familia de intercambio, por supuesto, y cuando finalmente llega al aeropuerto, allí está esperándola un miembro de su nueva familia. Y, ¿quién lo diría? Es tremendamente sexy.

Vivir con ocho chicos adolescentes es difícil, sobre todo cuando todos ellos son hombres lobo salvajes, o mejor dicho, muchachos-lobo, porque ninguno de ellos supera los veintidós. Y más que nunca cuando eres una chica, y aún más cuando no eres una mujer loba. Y no, no lo soy. Yo soy un kitsune. Sí, suena mejor que decir que soy una zorra demonio de la mitología japonesa. Aunque muy japonesa no soy, ya que mi pelo es rubio y mis ojos verde oscuro. Mi nombre es Catherine, y esta es mi vida.

Hombres Lobo