TRES SON MULTITUD
El paso de la adolescencia a la madurez es duro, muy duro pero, como siempre dicen, lo que no mata, te hace más fuerte. O si no que se lo digan a Vera que tendrá que descubrir por sus propios medios que, ni la gente ni el amor es lo que parece y aprenderá que a veces en la vida hay que pensar menos y disfrutar más.