Todas las noches eran las mismas. Los clientes llamaban, nos citábamos en algún motel barato, follabamos, pagaba por mis servicios, subíamos a su auto, me bajaba en alguna esquina y esperaba la llamada de algún otro necesitado. Todo era rutinario... Hasta que llego él con su mirada profunda.
Shadowland es un mundo muy diferente al que todos vivimos, donde el sadismo y el masoquismo están en el aire. Demetria tendrá que enfrentarse al cruel destino que la espera, como a todas las jóvenes de por allí. Tal vez le sea inútil oponerse, pero ella hará todo lo posible para que eso no se lleve a cabo.
«A tu cuerpo Ataré, pero tu alma y mente dominare» «Yo te Compre, ahora eres Mía» «Dime cuanto vale tu alma» «El dinero no te da placer, pero te lo paga»