LENA: El día que dejé de ser yo
A veces corremos detrás de una solución que al final sólo depara el inicio de otro problema. No sabemos quién nos rodea, por ello primero debemos saber quiénes somos. Nuestras vidas son una entramada de ramas que componen el amor, la desesperación, la envidia y el odio. La familia perfecta no existe, ni existirá.