Harry se a dedicado a ser todo lo que sus padres esperaban de un perdedor como él: un borracho mujeriego, que se ha olvidado de su escuela para disfrutar de "los placeres de la vida". Solo una persona es capaz de soportarlo y ayudarlo, su amiga Avril. ¿Qué pasara cuando pedir perdón por todos sus errores ya no sea suficiente?