Cuentos de Arlan II: El Príncipe

«La última vez que pensé que rendirme sería lo mejor fue justo antes de saber que Darius era mi padre. Me había resignado a que moriría aquél día, en la ejecución. Ahora me siento más vivo que nunca. Y no pienso rendirme nuevamente.» Mirsha Romust, ahora Mirsha Ameneyro, ha descubierto que todas l...

Aristoi

Los habitantes de la ciudad helada no necesitaban mirar al cielo para saber que la paz no lograría mantenerse mucho más. No les hacía falta estudiar la posición de las tres lunas para saber que los mares se elevaban y que la tierra se rompía. Lo saben porque notan cómo el fuego arde con más intensidad durante las noch...