Un asesinato,un profugo y todo un pueblo en busca de quien lo hizo.

Samantha Jones y Heather Calahan no podían ser las mujeres más opuestas: la una es una afable y pobre anciana que se lamenta por haber perdido su oportunidad de amar y ser amada, y que sin embargo, todos a su alrededor casi veneran por su alma generosa; mientras que Heather es una hermosa y millonaria joven de veintitrés años, adicta a las drogas y a las fiestas que lo tiene todo, y sin embargo odia su vida, a sus padres, pero por sobre todo, a Raphael Branagan, su prometido. El destino ha decidido enredarlo todo para que así, al menos una de las dos, encuentre al fin su camino y viva una segunda oportunidad.

Maurice Ramsay arrastra consigo el peso de un duro pasado, un corazón roto, y la desconfianza hacia el amor y las mujeres... sobre todo, las mujeres. Sin embargo, ya es tiempo de una segunda oportunidad en su vida, y ésta vendrá con el rostro que él menos imaginó. Abigail sabe lo que es amar, y lo que es callar. Ella llegará hasta el hombre que ama, no importa si para ello tiene que decir grandes mentiras, o develar terribles verdades. Acompaña a Maurice en la tercera y última historia de esta saga de amigos.

Mickie Irwin es una australiana recién llegada al acogedor pueblo de Cheshire, Holmes Chapel, junto con su hermano mellizo Ashton. Su vida no ha sido muy fácil de llevar desde la ida de su madre, y con este nuevo cambio de aires las cosas no parecen calmarse, todo debido a un adolescente extrovertido y rebelde que llenará su vida de adrenalina, diversión y reglas incumplidas, arrastrándola con él al mismísimo abismo, provocando en su vida más problemas de los que podría permitirse.

Todo un verano había pasado, Mickie Irwin volvía a estar de nuevo en Holmes Chapel, donde todo se vino abajo tan solo unos meses atrás. Con su gran problema fuera de combate, las cosas podrían arreglarse pero, ¿qué pasará cuando descubra que el piercing sobre el labio de Luke Hemmings no es lo único nuevo él? ¿Qué pasará cuando descubra que alejándose de su puerto seguro este había acabado hundido? Hundido y consumido finalmente por sus problemas.

Caminó hacia mi clavando esos odiosos ojos grises en los míos, intente retroceder lentamente hasta que mi espalda choco con una superficie plana y dura. Mis manos comenzaron a sudar y mi pulso se aceleraba con cada paso que él avanzaba ¿Qué mierda me pasa? Annabell Tienes novio, ademas no te puede gustar semejante idiota Se detuvo a unos escasos centímetros de mi rostro y puso sus brazos a cada lado de mi cabeza acorralándome contra lo casilleros -Aléjate - dije entre dientes -¿Que pasa? No eres tan valiente después de todo ¿o si?- susurro en mi oído, sus labios rozando mi piel con cada palabra que decía. -Lo diré una vez más -suspire, tengo que admitir que este estúpido huele demasiado bien, su perfume es como una droga, una deliciosa droga - A-L-E-J-A-T-E - deletree la palabra para ver si así la única neurona que tenía funcionaba -¿Qué pasa si no quiero?- ronroneó ahora sobre mi cuello -Te las veras con mi puño- -Creo que vale la pena si puedo probar esos hermosos labios tuyos. No,no,no,no tengo novio y es ¡Su primo! -Estas completamente loco - sus labios continuaban acariciando mi cuello -Si, loco por ti -¿Quien te crees? ¿Patch? -Solo si tu eres mi ángel Si esas palabras las hubiera dicho otro chico me hubiera derretido, pero vamos, él es Jace, no cuenta como chico. Sus suaves labios trazaron una linea desde mi cuello, subiendo por mi mandíbula hasta estar en la comisura de mis labios. No lo puedo creer pero moría de ganas por que me besara. Hasta que algo hizo clic en mi cerebro, tengo un novio al que quiero y no lo perderé por una estupidez, debo alejarlo ya ~Debes, pero no quieres Oh,vamos no me ayudes Le di un puñetazo en la mandibular logrando que se alejara -¡¿Cual es tu problema?!- grito, el enojo desbordando de su voz. -Tu eres mi problema- y dicho eso comencé a correr en dirección a la salida.

-Esos ojos están fijos en mí-no puede ser ... ¡Oh mi Dios! ¡Ese es mi nuevo jefe! Una historia que te sorprenderá,te enamorara y no te dejará pensar en otra cosa...Adictiva. Una joven bella se enamora locamente de su nuevo jefe,un magnate dueño de una fortuna y belleza inexplicable... Pero no todo es lo que parece, ella esconde algo al igual que él. Romántico y posesivo es una de sus cosas más bellas y crueles...enamoraté de la sangre árabe.

Marivic una chica de 23 años. Ha pasado por mucho estos últimos años.. Fue golpeada y maltratada por sus padres y su novio Marcel pero lo que ella no sabia era que donde ella trabajaría se volvería a enamorar