Ante usted, señor Espejo, es ante quien debo soltar todo aquello que no puedo seguir cargando. Obra completamente original. Prohibida su copia o reproducción total o parcial. Contenido registrado en Safe Creative. Código de registro: 1801015251154

Querido papá, Te dedicaré cada una de estas cartas Que revelan que sufro en agonía mientras tu ni me veías.

Kyle solo necesitaba las respuestas de los ejercicios. Identificador: 1506024242376 Fecha: 02-jun-2015 17:59 UTC Licencia: Todos los derechos reservados©

Irgan había mantenido conversaciones con gente de diversos países formados por agua, fuego, viento y tierra. Había visto cuerpos devorados por plagas y plagas devoradas por un mal mayor, y por tal causa creía haber visto a la mayor de las plagas, junto a las muertes más deshonrosas. Creía haber pensado más allá de lo que cualquier otro hombre joven hubiera conquistado en su mente, y creía ser distinto, de mayores dotes, incluso entre quienes habían sido bendecidos con la belleza y el ingenio. Pero lo que Irgan no había considerado, lo que debía concebir y lo que realmente cambiaría su destino, era que se encontraría de frente con el mismísimo infierno.

Esta es la historia de una persona que sabía muy bien cómo jugar con las apariencias. Te engañará al principio, y cuando la conozcas, engañará a otros que se dejen llevar por ellas, como todos.

Brenda es la típica muchacha rebelde de Nueva York. Fiestas por aquí, fiestas por allá. Hace un mes terminó la secundaria y no planea ir a la universidad; primero quiere vivir la vida. Sus padres están de acuerdo hasta que algunos rumores sobre su única hija cambian su opinión. Desesperados por recuperar un poco de sentido común en ella, la envían a Goldenwood, un estado independiente al otro lado del mundo que aun conserva monarquías antiguas y es gobernado por reyes. No solo es exiliada de su hogar, sino que también es obligada a desposar al príncipe Evan. Hay más de lo que Brenda cree detrás del matrimonio al que está obligada a contraer. [registrada en safe creative © bajo el código: 1608168893183] {Esta historia contiene una pizca de fantasía}

Estaba bastante harta. Harta de que te creyeras el rey. Necesitaba bajarte de ese pedestal en el que te habías subido. Aunque tenía un problema, yo te había construido el pedestal. No atendías a palabras, así que solo me quedó una opción. Seguro que la reconoces. Empecé a jugar tu mismo juego. ~~~ I was pretty tired. Tired that you believed yourself to be the king. I needed to get you off the pedestal on which you had got on. Although we had a problem, I built the pedestal. You didn't pay attention to words, so I only had one option. Surely you'll recognise it. I started playing your own game.