La vida de Dominic Armstrong siempre había sido un tormento. Durante su infancia y adolescencia tuvo muy mala relación con su padre, presenciaba la violencia con frecuencia a causa de su alcoholismo. Regresaba a casa ebrio y lleno de ira, comenzaba a golpear a su esposa sin razón alguna. Dominic intentaba apartarlo y atacarlo de la misma manera, pero su fuerza no era suficiente para detenerlo. Ahora con sus veintiún años de edad, seguía atormentándose por lo ocurrido. Se sentía responsable de que su madre estuviera muerta, si tan sólo hubiera llegado a tiempo ese día... Todo parecía estar perdido. Sin sentido. Sin motivación para seguir. Las únicas sensaciones que estaban en su mente era la injusticia, odio y desprecio hacia la vida. Sin embargo, esta serie de palabras se opacaron cuando se cruzó con una chica en una situación, aparentemente, insignificante. O al menos eso parecía.

Andrew; Valiente, atractivo, amable, cariñoso y protector. Annie: Pura, amable, desprotegida y dañada. Annie Cupper es maltratada fisicamente por su padrastro, todos los días oculta lo que le sucede y nadie la puede ayudar, ella tiene miedo, está desprotegida y totalmente dañada. Andrew es el nuevo profesor que comienza a impartir clases en el instituto de Annie, el comienza a darse cuenta de las marcas y moretones que ella tiene y decide acercarse a ella en plan de ayudarla, pero cuando comienza su acercamiento todos los secretos guardados del pasado comienzan a salir a la luz, adentrandose así a descubrir la verdad de su padre y lo que sucedió con el, por eso y mucho más ambos tendrán que protegerse.