Bù ài
JingYi siempre había admirado en secreto al líder de la secta Jiang, cada vez que por casualidad terminaban encontrándose en alguna casería nocturna procuraba demostrar lo mejor de sí mismo, mostrando sus habilidades tanto con la espada como con otras cosas, lo único que deseaba es que este lo viera, aunque fuera solo...