Libro #1 de la bilogía "Ayudante de Cupido". (DISPONIBLE EN FÍSICO). Se dice que si ruegas con todas tus fuerzas, Cupido te concederá la oportunidad de conseguir el corazón de la persona que amas. A cambio, él enviará a su ayudante para quitarte tú alma. "Sentenciados a la oscuridad, condenados al olvido. Un amor, prohibido por los dioses". ********** Él es un cruel peón, una pieza clave en un macabro juego en donde los enamorados son simples juguetes en manos de una criatura despiadada. Gala Brenton lo presentía, que hacer un pacto con aquel misterioso chico, resultaría ser tan peligroso como venderle su alma al mismísimo demonio. No obstante, permitió que ese tenebroso pensamiento cobrara vida a la vez que se hundía irremediablemente en la profundidad de aquella mirada tan gélida como el hielo, petrificando su sangre con el sonido de esa pregunta que transformaría su vida en un abismo sin retorno... ¿Serías capaz de sumergirte en la más escalofriante oscuridad, sólo por amor? ********** Contenido: 18 Capítulos/Epilogo. Copyright © Todos los Derechos Reservados. Número de registro: 1511175796494

Que pasa cuando tu manera de vida influye en que tan necesitados estén los chicos para una cita. No es una prostituta, solo es una pequeña ayuda a los chicos solitarios. Conoce la historia de amor de Terra una chica con una mejor amiga muy particular y una familia que se encuentra lejos y Tyler un joven bueno, educado, millonario y demasiado serio, con una familia amorosa.

Cansada de tener que ir de un lado a otro con sus padres, llega a un lugar nuevo y es atrapada por un par de ojos azules de un chico atractivo al igual que su mirada. Lo que no imagina es lo que estos ocultan y las aventuras que la llevaran a vivir, atrayendo con sigo un amor que será todo un reto, toda una confusión y aún peor, la decisión más difícil de su vida.

«En todo ese trayecto sólo se oía el repiqueteo de mis tacones. De repente, unos pasos apresurados se unieron a la sinfonía. Una sombra negra caminaba en dirección contraria a nosotros. A medida que se acercaba se podía distinguir que era un hombre, alto y con esmoquin. No se le veía la cara. Llevaba una boina y andaba cabizbajo. Antes de que este pasara a mi lado y lo perdiera de vista, unos complementos en su atuendo que a lo lejos no se veían a causa de su tamaño, me devolvieron de nuevo a mis problemas. En el bolsillo superior de su esmoquin llevaba dos claveles incorporados. Uno blanco y uno rojo. - Hannah... - Un susurro apenas audible sonó a la vez que el hombre pasaba de largo. Fue tan leve que el viento de su apresurado paso se lo llevó.» - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - OBRA REGISTRADA EN SAFE CREATIVE - CÓDIGO: 1503073416857 © TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS.