- ¿Piensas quedarte ahí parada todo el día ? - pregunta con tono arrogante. - ¡No, señor! - digo antes de sentarme en una de las dos sillas frente a el. - Buen modo de dar una primera impresión - dice mientras tiene su vista en unos papeles para luego firmarlos. - Lo siento no - mis palabras quedan a medias por su interrupción. - No te pedí una explicación y tampoco te di permiso de hablar - dice con su vista todavía en sus papeles.

Ella; una joven a la que le cortaron las alas cuando aprendió a volar.

Artur Kuznetsov es imperturbable, calculador, despiadado, inexorable y sobre todo temible. Conocido como el rey de la mafia rusa. No piensa dos veces a la hora de vengarse dice que la venganza debe ser dulce para él y amarga para la víctima. Mujer que lo conoce, mujer que no lo olvida. Olivia Smith es sociable, respondona, mimada, divertida y hermosa. Hija de los Smith, una familia que aparenta ser primorosa y empresarios. Su padre esconde un gran secreto que pondrá en riesgo la vida de su única hija. Ella querrá saber el oscuro pasado de su padre y Artur se encargará de mostrárselo mientras la hace sufrir teniéndola secuestrada. La venganza es dulce pero no engorda... Duele.

Madison Miller una chica muy linda de 23 años, vive en un rancho junto a sus papás, todo iba bien, pero se enteraron de que su padre está enfermo, los costos de su tratamiento han sido muchos y pueden perder el rancho, es aquí donde llega William Michaels sus madres los obligan a casarse, le ofrecen a Madison pagar sus deudas para salvar el rancho, ella acepta, porque no quiere perder el rancho. William y Madison no se llevan nada bien, se odian y tendrán que casarse, pero... ¿Podrán cambiar sus sentimientos? ¿Lograrán llevarse bien? ¿Podrá nacer el amor entre ellos? Pues lo descubriremos en ésta historia que acaba de comenzar.

CONTENIDO +18 (Queda bajo responsabilidad de cada uno leer esta novela) SINOPSIS Olivia Montero siempre ha vivido dentro de su zona de confort y hasta ahora no ha llegado nada ni nadie lo suficientemente fuerte para sacarla de ahí, pero siempre hay una primera vez para todo y Olivia está a punto de descubrirlo. Cuando el fuego, el deseo y la lujuria llegan a su vida por primera vez después de mucho tiempo, Olivia no está preparada para afrontar el mar de emociones que se le viene encima. Heron Stavrou tiene claras sus intenciones desde la primera vez que ve a Olivia . Un nuevo reto se le presenta cuando, por primera vez en su vida, tiene que ir detrás de una mujer para conseguir lo que quiere, pero eso solo lo incentiva más. La determinación de Heron y los prejuicios e inseguridades de Olivia provocaran una tensión sexual entre ambos que irá en aumento con el paso del tiempo hasta que todo explote en una vorágine de sentimientos, llantos, dudas y como no, pasión. Ranking #13 - inseguridad. 02/06/2021 #6 - robo. 08/08/2021

El director de una prestigiosa firma de abogados y exitoso fiscal del distrito de Manhattan Samuel Garnett, vive sin restricciones, experimentado, aventurero, apasionado e intenso. No le gustan los compromisos y se verá envuelto en una explosión de sentimientos, cuando conozca accidentalmente a la enigmática diseñadora Rachell Winstead. Lo que no sospecha es que ella traerá consigo al hombre que odia y por el cual está dispuesto a conocer el lado ilícito de la ley. Rachell es inteligente, segura de sí misma, con una belleza extraordinaria, la cual utiliza para manipular a los hombres, obtener beneficios y mantener a flote su sueño, ambiciona darse a conocer internacionalmente. También tiene sus propios demonios, no confía en el género masculino, en sus planes el amor no tiene cabida, para ella no es más que un sentimiento que esclaviza. Samuel y Rachell se verán atrapados en un vórtice, de orgullo, odio y amor ¿Podrán vencer los demonios? ¿Aprenderán a confiar? ¿Cuáles son los secretos que los atormentan?

Melanye smit, solitaria, fría, y guerfana que perdió todo en la vida . ella no cree en el amor, no cree en nadie, piensa que todos son iguales, no confía en nadie, menos en los hombres. sólo se tiene así misma, no deja que nadie entre en su vida. que pasará cuando conozca a su jefe, Liam connor ? Liam Cónnor, un empresario multimillonario de cadena de hoteles por todo el mundo, frío, mujeriego arrogante y creido, que no le importa nadie, sólo su familia, que es todo para el.

//Segunda parte de Querido Jefe Narciso// -¿Desde cuándo hace que te estás reprimiendo? -le pregunté, deteniendo su plan de huida. Él frunció el ceño, y vi cómo apretaba los puños a ambos lados de su cuerpo, intentando mantener la calma. -No sé de qué me hablas -gruñó, poco convincente. Una sonrisa se formó en mi rostro, viendo cómo se giraba lentamente hacia mí, muy a su pesar. -Creo que sí lo sabes -reí, cruzando tentativamente mis largas piernas. -No. -Puedes dejar de hacerlo -murmuré, ladeando ligeramente la cabeza, provocando que uno de los mechones oscuros de mi cabello cayera sobre mi rostro. Él se dio cuenta de ello, y cerró los ojos, apretando todavía más los puños. -Repito que no sé de qué me hablas. -Sé que quieres besarme. Apretó los labios, y supe por su reacción que había dado en el clavo. -¿Qué? -dijo en un hilo de voz. -Hazlo. -¿El qué? -Bésame de nuevo, Narciso.

Julia Spencer se levanta con una jaqueca terrible en una cama que no es la suya. No recuerda nada de la noche anterior, ni reconoce al hombre con quien durmió. Tratando de salir de la casa gigante en la que se encuentra, se pone en una encrucijada: Acepta ser la novia del hombre con quién durmió, por al menos seis meses o va a prisión. Pero las cosas se complican cuando una de las cláusulas del contrato especifíca que Julia debe "reducir la presión hormonal" de ese caballero.

*Historia ganadora de los WOWAwards 2017* -¿Has infringido alguna norma desde que trabajas aquí? - preguntó él, deteniendo mi plan de huida. -No. -¿Por qué no? -rio, mostrando aquellos dientes tan blancos y tan perfectos. -Porque no. Narciso se levantó, rodeó su escritorio teñido de blanco y reposó su trasero sobre él, con una pierna sobre la otra, mirándome como si fuera algo insignificante a través de aquel par de ojos azules. -Infringe una. Ahora. -¿Por qué iba a hacer eso? -me alarmé, aunque sopesaba ideas. -Porque quieres hacerlo. -¿El qué? Sonrió y supe que era la sonrisa más bonita del mundo, tal vez porque él quería que así fuera. -Bésame. Narciso, el hombre más arrogante y ególatra que había conocido, me acababa de decir que le besara. Allí, en aquel preciso instante. -Besa a tu jefe y rompe las normas.