Hey! tu, enana
Hayley lo odia, el......nadie sabe que siente el. o tal vez Hayley también es muy despistada.
Hayley lo odia, el......nadie sabe que siente el. o tal vez Hayley también es muy despistada.
—¿Que mierda me has hecho? , cada golpe situado en tu rostro, ha sido sufrido por mí. Joder nena, dime que no estoy colado por ti. Miré a mis pies y tras tomar una bocanada de aire, lancé mis guantes al otro lado del gimnasio. Le besé, le besé hasta poder llegar saciarme de sus labios.
¿Qué pensarías al estar casi dormida en la comodidad de tu habitación y en medio de la noche, escuchas un ruido bajo tu cama? Normalmente pensarías que es tu mascota o cualquier cosa que se te ha caído pero vaya sorpresa cuando no es cualquier cosa sino más bien, alguien. Y ese alguien no es nada más y nada menos que...
Cuando los padres de Nicole tienen que salir del país durante 6 meses por razones de trabajo, estos deciden poner un niñero para ella y sus hermanos, pero de lo que sus padres no se enteraron es que contrataron a uno de los mejores amigos de Zack, Adrian y Brian, sus hijos mayores. -Padre no puedes dejarme con ellos...
[Editando] Summer Matthew, una chica de doce años relativamente... loca, o al menos eso piensan las personas que la rodean. Ella vive junto a sus padres, su hermana Hayley, una chica de veinte años realmente controladora, Dylan, un joven de dieciséis años... normal. Summer, a sus doce años, conoce a muchas personas...
-Si no te gustan las fanfics super irreales e incoherentes no leas esta :) EDITANDO. Las casualidades de la vida existen y ______ Reynolds sabe eso desde el día en que él se introdujo en su vida por alguna cósmica y desconocida razón. Y bien, las cosas cambian de un día para otro pero lo único que se sabe con certeza...
-Oye tú mocosa, ¿Tu madre no te ha enseñado a ser mas dulce?- mal dicho Dawson con mi madre no. -Claro que me ha enseñado a ser dulce, ¿Quieres ver lo dulce que puedo llegar a ser?- él asintió. Me levanté de mi asiento, cogí mi pudín de chocolate y lo estrelle en su rostro. - Espero que disfrutes de mi dulzura IMBÉCI...
No podía creer que mi madre me hubiera dejado con semejantes bestias. ¿Acaso no tenía corazón? ¿Qué clase de madre deja a su hija con una panda de gatas locas y chillonas y con un grupo de chicos con más músculo en los brazos que cerebro en la cabeza? Desde luego una buena madre no hace eso. Por favor, ¡qué alguien m...